162. SIN RAÍZ / ROOTLESS
( Parte 2-2 / Part 2/2)
"Échame una mano" /
"Give me a hand"
-Bueno, no hay dos sin tres…. Me portaré mejor la próxima vez- me dije fingiendo que me perdonaba.
De todos modos, no tenía tiempo para arrepentimientos. Sabía que tenía que mentalizarme, ya que en breve volvería a estar exponiendo en el mercadillo de artesanía, para el que me habían vuelto a seleccionar.
Justamente fue la noche previa a aquella exposición, que terminé de dibujar esta lámina...
-Si representas el oráculo de lo que me espera... Mejor no quiero saber nada...¡Mucho árbol para tan pocas raíces!- le solté con ironía.
Todo lo que veía era un árbol triste y torcido, descompensado y plantado sobre una base tan inestable que parecía enraizado en el aire.
Las cuatro esferas pintadas en dorado, que había escogido para hacer balance de las distintas áreas de mi vida (crecimiento personal, relaciones, salud, prosperidad), más que soles parecían las viejas bolas de un árbol de Navidad, ¡y saltaba a la vista que no todas pesaban lo mismo!
De las esferas superiores apenas brotaban hojas mientras que las de abajo estaban tan sobrecargadas, que no permitían al árbol crecer recto hacia arriba.
Mantener el balance no era mi fuerte, eso ya lo sabía.
Cada vez que me centraba en algún área de mi vida, mi tendencia era olvidarme del resto, y a veces las acababa desatendiendo más de la cuenta.
En cuanto a la luna, que parecía ser el centro de atención en lo alto de la copa, más que a la estrella de un árbol de Navidad, me recordaba a una pelota sucia. Ni siquiera me quedaba claro qué representaba exactamente.
En un principio pensé que simbolizaba el recipiente de mis sueños. Pero finalmente, me pareció que aquel intento de luna no tenía pinta de soñar mucho, y me decanté por creer que más bien representaba el poder de mi subconsciente.
-¡Ni me quiero imaginar cuanta mierda habrá contenida ahí adentro!,¿será esa luna la causante de que este árbol se vea tan descompensado? ¡Míralo, no le queda más remedio que crecer hacia un lado, como si mirase todo el tiempo al pasado!- me dije, y aquello me tocó las narices.
-¿Cómo iba a entender qué mierda hacía si lo que regía mi vida eran un montón de mandatos o programas ocultos que desconocía?
Aparte de eso, el hecho de que que las raíces del árbol, más que nutrir pareciesen estar asfixiando al glifo que hablaba de dones y talentos, también me pareció un mal presagio.
Y que a su vez dichas raíces acabasen adoptando la forma de los tres números del que hablaba el último video que había escuchado por azar, sólo me condujo a pensar en todo el trabajo que tenía por delante si quería enderezar aquella planta antes de que fuese demasiado tarde...
¿Tarde, para qué? ¿y por qué tenía que calentarme la cabeza en enderezar un árbol torcido, si los bosques estaban llenos de ellos?, ¿no habían sido desde siempre los jardines ingleses mis favoritos porque en ellos la naturaleza se expresaba libremente?- me dije intentando quitarme responsabilidad de encima.
No tardé en darme cuenta de los motivos por los cuales, me dijese lo que me dijese, sentía la necesidad por lo menos intentarlo.
Debía hacer algo porque aquel no era un árbol cualquiera, sino el mío propio.
Me correspondía a mí cuidarlo. Afortunadamente, todavía cabía la posibilidad de verlo algún día convertirlo en un árbol fuerte, pero eso jamás sucedería si le permitía seguir creciendo a su aire, torcido y desnutrido.
Para reparar el árbol había que comenzar fortaleciéndolo desde abajo. No había otra manera de enderezarlo, que empezando por anclarlo bien al suelo...
¡Menudo dilema para una jardinera de pacotilla que ni siquiera conocía terreno alguno donde replantar a aquella planta para que echase raíces!
Así que decidí ser práctica y acogerme a lo que por el momento, sí estaba al alcance de mi mano hacer.
Decidí comenzar por ir equilibrando el peso para que no siguiera lastimándole tanto. Eso implicaba ir poco a poco despojándole de todo lo accesorio. También caí en la cuenta de que debía cesar de ahogar unas partes con demasiada agua y de matar de sed a otras.
Todo eso aliviaría un poco el daño, aunque no solucionaría el problema...
Sabía que para enderezar aquel tronco y hacerlo crecer hacia arriba, debía ir mucho más lejos. No me iba a bastar con colocarle unas tablillas a modo de corsé para disimular su "escoliosis". No me libraría de la tarea de excavar a fondo hasta que lograse averiguar el fallo que había en la estructura.
Únicamente llegando a la raíz del problema, podría saber si de veras había algo que pudiese hacer para corregir su postura o tendría que conformarme con fortalecerlo para que las pocas raíces que tenía no se despegasen y el árbol se partiese en dos.
En aquel momento no me paré a reflexionar acerca de lo que en verdad se me estaba pidiendo, y mucho menos, de las consecuencias que acarrearía no hacerlo...
Ya se encargaría la vida de explicármelo a gritos en los meses venideros.
Hoy sólo puedo decir que aquí sigo, medio enraizada y haciéndome amiga de la gravedad para no ir por la vida flotando a ras del suelo.
Explanation:
I could justify myself by saying that it wasn't the time, the place or the way, but I still felt disappointed with myself.
-If you represent the oracle of what awaits me... I don't want to know anything... So much tree for so few roots!- I exclaimed ironically.
The four gold-painted spheres I had chosen to take stock of different areas of my life (personal growth, relationships, health, prosperity) looked more like old Christmas tree balls than suns, and it was obvious that some were heavier than others!
The top spheres were barely sprouting leaves while the bottom ones, were so overloaded that they did not allow the tree to grow straight upwards.
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